La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda postergar el primer baño del bebé recién nacido hasta 24 horas después del nacimiento, o esperar al menos 6 horas si no es posible dejar pasar un día completo por motivos culturales.
Motivos para Retrasar el Primer Baño
La salida del recién nacido del medio intrauterino al exterior es la primera crisis a la que se enfrenta el ser humano en su vida y supone una adaptación de un medio acuoso a uno gaseoso, con los cambios bruscos que representa para los diferentes sentidos del bebé: temperatura, luz, sonidos, olores, e incluso sabores, puesto que hasta ese momento no ha necesitado abrir la boca para alimentarse.
Existen factores importantes que favorecen la adaptación en esta transición y que facilitan el reconocimiento entre madre e hijo, con un papel importante en el generación inicial del vínculo maternofilial.
Factores que Influyen en la Adaptación del Recién Nacido al nuevo Medio
Tiempo piel con piel después del nacimiento entre madre y bebé
El contacto físico del bebé recién nacido sobre el pecho de la mamá forma parte del proceso de identificación íntima con la principal figura protectora desde el proceso de gestación y para el resto de su vida.
Olor
La similitud entre el olor del líquido amniótico y el que desprende el pecho de la mamá anima al bebé recién nacido a buscar el seno para engancharse.
Temperatura
La temperatura corporal del bebé recién nacido se estabiliza mejor por si misma con el paso de las horas después del parto.
Por todo ello retrasar el primer baño aumenta la probabilidad de hacer exclusiva la lactancia materna. Eso significa que postergar el primer baño aumenta la facilidad con la que el bebé sólo tomará leche materna y la influencia positiva que ésto provocará en su desarrollo.
Por otro lado la piel del recién nacido sale cubierta de una envoltura grasienta y blanquecina llamada vérnix caseosa (este nombre viene del latín y su significado se da por el aspecto de “barniz de queso” que presenta. La función de esta capa es proteger la piel del bebé, que gracias a sus propiedades antibacterianas va a mantenerlo al margen de posibles infecciones.
Pasos para Bañar a un Recién Nacido
Bañar a un recién nacido puede dar un poco de miedo las primeras veces, pero no hay nada de que preocuparse porque con un poco de práctica se irá haciendo con mayor soltura y comodidad.
Cosas a tener en cuenta sobre el baño del recién nacido
No necesario que bañes a tu hijo todos los días
Cada día y cada vez que cambias los pañales ya estás limpiando las partes que necesitan más atención: la cara, el cuello y el área del pañal controlando las irritaciones en los pliegues de la piel, que incluye los muslos, las ingles, además de las axilas y el mentón.
Por la noche puede favorecer la rutina de sueño
Bañarlo por la mañana o por la noche depende de lo que decidas, pero si lo haces por la noche el agua tibia facilitará que se relaje para después irse a dormir.
Adecúa la temperatura para desnudarlo
Asegúrate antes de desvestir al bebé de que la estancia esté a una temperatura adecuada.
Toma la temperatura del Agua
Igualmente el aguda debería estar a unos 37-38 grados para evitar quemaduras ya que la piel de los bebes es extremadamente sensible. Una de las formas para saber si tenemos el agua a una correcta temperatura es introducir nuestro codo. La sensibilidad de esta parte de nuestro cuerpo nos ayudará a detectar si el agua se encuentra a la temperatura cálida adecuada.
Prepara el sitio del baño del recién nacido
- Una toalla grande o un cambiador donde tumbarás al bebé antes y después de baño.
- Un fregadero o una bañera poco profunda, asegurando que el agua no pasa de una temperatura tibia o cálida.
Prepara ropa de cambio y cremas hidratantes
- Elementos básicos como una toalla preferentemente con capucha, champú muy suave y neutro para bebé y sin fragancia, jabón especial para la delicada piel del niño, una toalla más cerca por si hay alguna “fuga de pis”, una muda de ropa y ropa limpia.
- Si vas a realizar un pequeño masaje también es conveniente que tengas cerca de ti una crema ligera de bebés para la piel o un aceite si es orgánico mejor.
Método a seguir en el Baño del Recién Nacido
- Sostén al bebé con la palma de la mano entre la espalda y la cabeza, manteniendo ésta fuera del agua, y deja una mano libre para lavarlo.
- Si aún tiene el cordón umbilical sin desprenderse, usa unas gasas estériles y una pequeña cantidad de alcohol de 70 grados para curarlo después del baño. Una vez bañado, cuando el cordón esté libre de humedad, coloca sobre él las gasas sin apretar. No intestes secarlo con una toalla, simplemente lo dejas secar por sí solo y después ya lo puedes curar, hasta que finalmente caiga por sí solo.
En resumen, lo más destacable del baño del recién nacido es lo siguiente:
- La OMS recomienda postergar el primer baño del recién nacido hasta 24 horas después del nacimiento o al menos 6 horas si es necesario.
- Retrasar el baño favorece la adaptación del bebé al nuevo medio y la lactancia materna.
- La piel del bebé está cubierta de vérnix caseosa que protege su piel y evita infecciones.
- No es necesario bañar al bebé todos los días, una limpieza diaria con cambios de pañal es suficiente.
- El baño por la noche puede ayudar a la rutina de sueño y es importante adecuar la temperatura de la habitación y del agua para evitar quemaduras.